martes, 8 de enero de 2013

¿Pero por que te gusta leer?

Muy buen día mis estimados lectores.

Me eh propuesto en este año escribir mas, compartir mas esa parte de mi que pocos conocen y todavía menos comprenden.

Así que el día de hoy traigo en mi manos un tema que durante toda mi vida ha sido controversial.

Pero como es costumbre les daré un poco de contexto.

Desde que estaba yo en mis años juveniles de secundaria el habito de la lectura se me quedo muy fijo, aunque desde antes había yo comenzado,  fue en esos años posteriores cuando los libros y yo nos apegamos profundamente, para decirlo mas claro fue cuando yo comencé con mi fijación a no salir de casa sin mi libro.

No fui yo una chica popular, todo lo contrario, yo era una chamaquita pequeña, sin grandes atributos físicos y sobre todo con un libro en el regazo, usted podía verme día a día a la hora del recreo en algún rincón ,generalmente soleado, con mi libro y mis papas (alimento de los dioses).
Este comportamiento poco usual generalmente causaba diversas reacciones, por ejemplo:

-Mis maestros se mostraban gratamente sorprendidos.
-Los nerds me cosideraban solitaria y queriendo llamar la atención
-Los populares me veían como la rarita

Este habito lector me beneficio en la preparatoria, cuando mis compañeros muy inteligentemente aprovechaban mi gusto por la lectura para que yo me reventara los libros obligados por la escuela y les ayudara a hacer sus resúmenes, yo inteligentemente les cobraba grandes montos monetarios.

Ahora en mi joven adultez el habito es mas aceptado entre mi circulo social, aunque aun hay varias personas que se desconciertan ante mi vicio por los libros.

Ahora el tema que nos atrae hoy, es que la pregunta sigue siendo la misma desde hace catorce años: ¿Pero por que te gusta leer?

Eh respondido a esta pregunta tantas veces que hoy en día a quien osa hacérmela le contesto un simple "Por que si"; pero ustedes y yo sabemos que es mucho mas complejo que eso, es por eso que hoy les quiero compartir lo que significa para mi leer.

La experiencia empieza desde la selección del libro, ya sea que lo compre en una tienda o me sea prestado por alguien, ese momento en que nos conocemos el libro y yo  es muy especial, es como la primera mirada en la que nos evaluamos el uno al otro. Lo siguiente es cuando abro sus paginas, el aroma inunda mis sentidos y comienza a activar mi mente con las posibilidades que este encierra, no importa si es muy nuevo o muy viejo, cada uno guarda un perfume propio, intimo, seductor y casi irresistible. Pero la magia ocurre cuando empiezo a captar las palabra impresas, las frases parecen salir del libro como humo espeso y comienzan lentamente a circundarme, a hipnotizarme, a guiarme y finalmente a llevarme; el mundo al rededor pierde forma, olor, color e interés. Ahora el libro me posee, yo camino sobre sus calles, respiro su aire tibio o frío, siento el dolor o alegría de los personajes como propia, me angustio ante el futuro incierto. No importa si tengo que interrumpir la lectura, por que en ese momento ya estoy viviendo en dos mundos, y creanme cuando les digo que en varias ocasiones eh preferido el mundo entre las paginas. Finalmente la historia va finalizando, lo noto en las hojas restantes, las emociones no podían ser mas complejas, hay nostalgia por que tengo que salir de ese mundo pero también hay alegría por que mis dudas se disipan. El punto final, el viaje termino, no hay mas que decirnos. El libro sabe que cumplió su propósito, ha cambiado mi vida, mi respeto hacia el nunca perecerá.

Como pueden ver esto es algo complejo para mi de explicar, es decir, no puedo decir esto cada vez que me hagan la mentada preguntita, no todo el mundo quiere una explicación tan detallada y lo que es peor no a todo mundo le interesa, solo preguntan por hacer conversación, por curiosidad pasajera o algunos hasta para ridiculizar.

A ti mi estimado lector, te comparto esto con toda la esperanza de que en algún momento puedas experimentarlo tu también, o mejor aun que comentes (para variar mis lectores), que me cuentes que es para ti (si es que tienes este habito) el empezar a leer un nuevo libro.

Espero este año entretenerlos, divertirlos, enternecerlos, excitarlos, activar sus sentidos y emociones con estos relatos. Prometo tenerles noticias muy pronto.

Feliz Año 2013

miércoles, 2 de enero de 2013

La Insistencia de la Cerveza

Les saludo una vez mas mis queridos y exclusivos lectores.

En esta ocasión el tema cambia drasticamente, ya que no les hablare de mi emocionante y empalagosa vida romántica, a esa historia le pondremos pausa, ya que en este momento tengo un temita en la mente que no puedo sacarme de encima.

Empecemos con un poco de contexto.

Una salida a comer con mi jefe y un par de compañeros de la oficina.

-¿Que quieres tomar? - me pregunta mi jefe.

-Una naranjada mineral por favor

-¿Como que una naranjada? ¿No prefieres una cerveza?

-No gracias, no me gusta la cerveza, además no tomo.

Imaginen por favor el sonido ensordecedor de una llantas rechinando en el pavimento por el enfrenon bárbaro que acaban de dar debido a mi declaración.

Si, es verdad, no me gusta beber alcohol.

Estas palabras las he repetido en varias ocasiones ya que son reales, y estas son algunas de las respuestas que obtengo:

-Na que, no tomas ... consejos !!
-¿Estas jurada?
-¿Por que? ¿te pasa algo?
-¿Nunca has tomado?
-¿No te tomas ni una?
-Que ¿te pegan?

Durante los pasados digamos 10 años de mi vida me he reventado esta clase de respuestas, mientras era mas joven pues hasta cierto punto lo entendían y apoyaban, pero ahora a mis 26 la cosa ya no es tan sencilla, por lo menos no para aquellos que me acompañan a mis salidas, y es que esas palabras parecen funcionar cual hechizo mágico :

-No bebo

!!! PUFF !!!

Soy un animal extinto que debe ser observado y sobre todo salvado.

Las personas piensan que el no beber es una deficiencia o un defecto y que deben sacarme de mi estado de miseria y presentarme al hermoso y enorme mundo del alcohol.

Pero aquí les reitero que no me gusta, y les quitare algunas dudas:

1) Si, eh probado el alcohol en varias presentaciones.
2) Si, he estado ebria en un par de ocasiones.
3) No, no sufro de ninguna enfermedad mental que me impida tomar alcohol.
4) No, no se trata de ninguna manda, juramento o religiosidad.
5) No, no quiero ni un traguito chiquito.
6) A mi me pegan por gusto no para prohibirme hacer cosas.

Y es que en estas fechas la gente es muy insistente en estos temas y las salidas son tediosas cuando la mitad de la noche la gente trata de hacerte cambiar de opinión.

Se que esto no será leído por la totalidad de mis conocidos con lo cual seguramente seguiré haciendo la aclaración de que no bebo por el gusto de no hacerlo, sin embargo aquellos que si tengan la oportunidad única (no creo que nadie se lo lea dos veces) de leer esto sabrán que "no es por hacerles desaigre, es que yo no soy del vicio"