martes, 29 de septiembre de 2020

Secundaria Progresiva

 

Hola lector, espero tú y los tuyos estén muy bien. 

Si me has leído con anterioridad sabes que tengo Esclerosis Múltiple, esta ya lleva unos años en mi vida y gran parte de ella la he aprendido a manejar. Pero a partir del 2018 empeoró, pasó al siguiente nivel “Secundaria Progresiva”, ya había un aumento considerable a mi nivel de discapacidad.

Tal vez el cambio para mucha gente sea mínimo, pero el usar bastón y la debilidad actual en piernas significo un cambio muy drástico y doloroso para mí.

A partir de ese año mi movilidad se hizo muy complicada, ya no me es fácil realizar tareas que antes hacia con regularidad y lo más difícil es que ahora tengo que pedir ayuda para muchas cosas, más incluso que cuando perdía temporalmente la vista. Me convertí en “Discapacitada” con todas sus letras y el peso que conlleva.

Entonces en mi “nueva realidad” (si, para mí este concepto lleva activo ya algunos años antes de la Pandemia) aprendí a hacer cosillas como: Subir un solo piso del edificio por el elevador, Buscar filas más rápidas por no soportar estar de pie mucho tiempo o Encontrar siempre un sitio para sentarme. Cosas que pueden sonar simples y bobas, y tal vez lo son, pero hay una en específico a la que no logro acostumbrarme; a no poder hacer mis cosas o mandados por mi misma, y tener que pedir el favor a alguien más.

Por que eventualmente me tengo que enfrentar a caras de molestia, malos modos o a ajustarme a cuando la gente quiera y/o pueda.

¿Y cómo decir algo?

Si me están haciendo el favor

Entonces intento con todas mis fuerzas no molestarme y entender a la otra persona, procuro no pelear ni crear mayor conflicto.

Pero por dentro debo confesar que muero un poco cada vez que tengo que pasar por esto. Me siento muy inútil y pedinche.

Si tú mi estimado lector, llegas a ser el cuidador de una persona con alguna discapacidad, no lo hagas pasar por esto, sabemos que es difícil cuidar de alguien más, pero también lo es depender de alguien más, y si algo te enfada, mejor háblalo con calma para resolverlo de la mejor manera, no esperes que una cara o gesto tengan que ser traducidos para ver que algo está mal.

Solo es un consejo.

¡Saludos y cuídate!

viernes, 26 de junio de 2020

Los Hobbies

Hola lector, un gusto saludarte nuevamente, espero tu y los tuyos estén muy bien. Hoy quiero comentar acerca de la actividades que siempre habíamos postergado por falta de tiempo y bueno ahora ya tenemos el tiempo, podemos hacer los hobbies que siempre quisimos, la cosa es, ¿Qué hobbies?

Algo que ayuda mucho en mi caso es leer. Es liberador salirme de mi piel y vivir como alguien más. Con una resolución de todas sus vivencias, esto puede provocar un cambiante estado de ánimo en mí, guiado directamente por lo que estoy leyendo en el momento por lo cual cuido mucho que no sean lecturas deprimentes, claro a veces no hay forma de saberlo hasta que se lee el libro, pero voy ubicando a estos escritores para no caer muy a menudo en sus textos tristes.

Como resultado, la lectura es mi parte favorita del día, y para tener cierto orden, trato de limitado solo a las noches antes de dormir bajo las cobijas de la cama. Este pasatiempo me relaja y tranquiliza mucho, sin embargo, a veces tengo la impresión de que no es muy valorado por la sociedad en general, y es que ¿cómo hacerlo? La gran mayoría sabe leer y en comparación tengo cero méritos.

Soy lenta y contrario al mito no tengo una ortografía impecable. Lo que da como resultado que solo se vea como una garrafal perdida de tiempo y recursos por que los libros no son baratos. Pero qué puedo decir, me gusta mucho y hasta el momento es lo único que me atrae tanto como para dedicar varias horas y esmero.

Pedo ser bastante disciplinada cuando me lo propongo Y hay hábitos que en un principio detestaba con toda el alma, como el ejercicio. La verdad lo alucinaba y cada que alguien me decía que tenía que hacerlo, ponía cara de fastidio y cerraba por completo los oídos (como quiera que eso sea posible). Bueno, pero como siempre pasa, me convencí de debería intentarlo, luego noté que no aguantaba mucho tiempo, pensaba que era por falta de práctica, pero después descubrí que no era así. Ahora después de mucha prueba y error, encontré una rutina funcional para mí; no es mucho tiempo, pero intento ser constante y por lo menos entrenar 6 días de la semana 20 o 25 minutos. Esto no me da un cuerpo de modelo, pero me mantiene dentro de lo saludable sin tener que hacer sacrificios excesivos en cuanto a alimentación.

Ahora, también me gustan los idiomas y trato de estudiarlos con frecuencia, el inglés lo medio domino, pero ahora tengo como reto el alemán que me parece muy entretenido y sorprendente para muchos por que piensan que es imposible entenderlo, aunque en realidad no lo es; lo practico en una aplicación que retome recientemente y como el inglés con música (hay mucha y muy buena en alemán).

Ahora pienso en otras posibilidades, hace no mucho pensamos hacer videos, actividad en la que pienso podría encajar, y he hecho un par que pienso quedaron bien, la parte que se me complica es hacer un guion y memorizarlo sin perder la soltura, pero como dice mi pareja todo el tiempo lo tengo que practicar mil veces y tal vez en la 1001 me salga bien. No se si la gente me seguiría o llamaría un poco la atención, pero tal vez vale la pena intentarlo, da miedo eso de exponerse al mundo y permitir que sean jueces y duros críticos. Pero de momento sigo escribiendo para liberar un poco la mente y dar buen uso a mi tiempo.

martes, 23 de junio de 2020

El año de los Eventos

Bueno este año 2020 en definitiva nos aporreo desde muy temprano.

Nos regalo una Pandemia de la cual aún no salimos completamente, seguimos esperando que los que saben del tema nos obsequien con una vacuna.

Pero eso no es todo (como si fuera poco), por que además hemos tenido desde fugas en una de las presas más importantes de la CDMX, tormentas que causan graves estragos e inundaciones, y para acabar (esperemos) un sismo bastante fuerte y perceptible.

El mexicano promedio tiene los nervios de punta, y los tendrá destrozados para cuando la crisis económica mundial deje ver su fea cara. Ahora si no tenemos más que encomendaros a nuestro santo de confianza y valorar hasta lo más mínimo que aún tenemos. Llamemos a todos nuestros seres queridos (ya que no podemos ir a verlos) y a las amistades que de pronto tenemos muy olvidadas y descuidadas; olvidemos rencores y limemos asperezas con nosotros mismos.

Este año no ha terminado y no sabemos que otras sorpresas traiga bajo la manga, pero debemos afrontarlo con tanta entereza como nos sea posible.

Por mi parte puedo decir que sigo explorando mi propio ser, aprendiendo que hay más en mi interior que aún no he explotado del todo y que puede servir de catarsis ante tanta incertidumbre y desasosiego. Lucho por vencer mis demonios y autocríticas que no ayudan. Puedo ver con claridad todos mis defectos, pero no debo dejar que ellos me intimiden a tal grado que me detengan y me hagan quedarme estática viendo pasar la vida demasiado asustada para moverme.


miércoles, 4 de marzo de 2020

Terrible Compañía

Hola lector


Esta vez nuevamente vengo a confesar mis faltas, nadie me dará absolución, pero al menos lo saco de mi sistema esperando que pueda empezar a sanar
Pues resulta que me doy cuenta con tristeza que se dice de mí que no sé trabajar en equipo, mucho me temo que es cierto y hay muchas pruebas, mis compañeras nunca han sido exactamente mis amigas, sino todo lo contrario siempre se quejan de mí. Me doy cuenta de que el problema siempre he sido yo, no soy buena compañía, cuando he trabajado sola si funciono, pero no si tengo que comartir el espacio con alguien más. No sabría decir desde cuando soy pésima compañera, pero sospecho que esto tiene muchos años y para ser honesta me es difícil saber por qué me perciben así. De verdad me cuesta mucho y el detalle no es que me crea perfecta ni mucho menos pero sí diré que le pongo empeño a lo que hago, y tal vez es eso, que al final me molesta  mucho ver que las demás  no pongan el mismo empeño, y sobre todo el tema de la puntualidad, es un área muy sensible para mí y para la mayoría es lo de menos, luego entonces lo que para mí es una falta gravísima para el resto es de risa. Entonces yo me siento molesta, y aun que no digo nada ellas notan mi molestia y supongo que mis respuestas serán cortantes y denoto hostilidad; pero a ciencia cierta no lo sé. Y preguntarles es poco claro por qué no me dan respuestas claras solo cosas como:


-Cómo te pones
-Ya estás otra vez en tu plan
-De que te pones así ni quién te aguante
-Ya vas a empezar con tus cosas


Pero son afirmaciones muy vagas y totalmente subjetivas.


Y bueno en este momento estoy haciendo una introspección y me declaro culpable de todos los cargos. No tengo claro cuál sería la solución o qué se espera de mí. De momento me siento emocionalmente devastada con lo cual tendré que lidiar de la mejor forma porque nadie entendería mi suicidio por una banalidad